Me gustan tus ojos y tus pecas. Me gusta la forma en que tu necio cabello se interpone entre nuestros labios. Me gusta acariciarte. Me gustan tus piernas y caderas.
Me gustas para mí, me gustas en mi cama. Me gustas cuando hablas y me gustas cuando callas. Me gustas cuando ríes y me gusta cuando tus labios dibujan una fina sonrisa en tu rostro.
Puedo pretender que no me muero de las ganas por que estés aquí. Puedo dejar todo atrás si me lo pides con un susurro. Puedo olvidarte si así pudieras ser más feliz y aguantar el vacío que quede en mi pecho que recorre como una descarga electrica hasta mi abdomen.
Me gustas tanto como al mar le gusta la luna. Me gustas por como eres. Me gustas tú y todo lo que conllevas. No podría cambiar nada de ti.